Con poesía, música y memoria la comunidad ariqueña celebró el miércoles 10 de diciembre una emotiva jornada en homenaje a los 80 años del Premio Nobel de Literatura otorgado a Gabriela Mistral.
El evento —organizado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, a través de la Seremi de las Culturas de Arica y Parinacota y la Dirección Regional del Servicio del Patrimonio Cultural— puso, en el centro, la relación de Mistral con los territorios, rescatando su legado como figura de pertenencia, memoria viva y creación profunda.
"Estamos muy contentos de conmemorar los 80 años desde que Gabriela Mistral recibió el Premio Nobel de Literatura y se convirtió en la primera persona en Latinoamérica y, hasta ahora, la única mujer en la región en obtener esta distinción. Una celebración que no sólo recuerda a una gran escritora, sino que también a una de las voces más firmes en la defensa de los derechos de las mujeres, los pueblos indígenas y las infancias", indicó Raúl Calderón, seremi (s) de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
La jornada abrió con la presentación del Dúo Lagar, integrado por Claudia Parra y Geldy Campusano, quienes musicalizaron y reinterpretaron poemas del libro Lagar, generando uno de los momentos más sensibles de la tarde.
Luego, se realizó la inauguración de la exposición “Arica Merece un Destino Mayor y Mejor”, una propuesta visual que revisite el paso de Gabriela Mistral por Arica en 1954. La muestra, que reúne trabajos del colectivo “Arpilleristas Bordando Historias”, emocionó al público con su lectura textil de la vida, obra e imagen de la poeta.
El acto artístico continuó con la presentación “Mujer, Hemisferio Humano” de Banda-Da, seguida por las interpretaciones de Susana Montecinos, Marcela Araya, Claudia Ojeda y María José Olivares, quienes se desplegaron desde distintos puntos de Plaza Grecia —como el Hotel Sotomayor, el balcón de la casa de Ariela González Yanulaque y el escenario central— para cantar y declamar los poemas La Pajita, Apegado a Mí, Miedo, Vergüenza, Balada, La Abandonada y Oración a la Maestra, cerrando con Carta a Arica, texto que Mistral dejó tras su paso por la ciudad en 1954.
Al finalizar la jornada, Lenina Barrios Atencio, directora regional del Servicio del Patrimonio Cultural, señaló que “como institución, tenemos el deber y la convicción de sostener estos espacios, y lo que vivimos lo confirma: la cultura sigue siendo un punto de encuentro para Arica. Ver a niñas, jóvenes y personas adultas conectando con la obra de Gabriela Mistral nos recuerda que su legado está más vivo que nunca, y que la comunidad responde con una fuerza increíble cuando se abren instancias que no solo convocan, sino que emocionan y transforman. Mistral es Patrimonio que está vivo y que sigue vigente".
“Arica Celebra a Mistral” convocó a más de 100 personas que repletaron Plaza Grecia, transformando la tarde en una verdadera fiesta cultural en torno a la figura de la Nobel chilena.