El mantenimiento preventivo es fundamental para el buen funcionamiento de la red de alcantarillado, por eso, los equipos y el personal de la Unidad de Gestión Autónoma de Aguas del Altiplano cubre, mensualmente, cerca de 40 kilómetros de colectores púbicos en las diversas localidades de Arica y Parinacota y Tarapacá.
Para ello, la compañía cuenta con un intenso plan de trabajo, el cual considerar sectores críticos de la ciudad, donde de forma recurrente se producen eventos de obstrucciones y reboses de aguas servidas, lamentablemente producto del mal uso del alcantarillado.
Según precisa Nicolás González Cerezo, jefe de la Unidad de Gestión Autónoma, cerca del 50 por ciento del material y objetos que se retiran del alcantarillado durante las mantenciones preventivas corresponde a basura, es decir, trapos, toallas húmedas, pañales, plásticos y todo tipo de desperdicios.
“Sin embargo, la incidencia del mal uso del alcantarillado en las obstrucciones y reboses de aguas servidas, es decir, en el trabajo correctivo es más alta aún. En más del 80 por ciento de los casos, es por objetos totalmente ajenos a la red y eso, lamentablemente, perjudica a los mismos vecinos, por lo cual es muy importante tener conciencia y hacer un buen uso del alcantarillado”, destacó González.
En este sentido, el jefe de la Unidad Autónoma reforzó el llamado al buen uso del alcantarillado evitando verter basuras, restos de comida y aceites o grases a través de la red.
SISTEMA DE MONITOREO
Asimismo, Nicolás González destacó la implementación de un sistema de monitoreo, en tiempo real a través de GPS, de toda la flota de camiones de Aguas del Altiplano, incluidos los camiones de acción combinada (Vactor) y camiones JET, utilizados para la mantención del alcantarillado, así como de los camiones aljibes con que cuenta la empresa.
“Ello nos permite conocer su ubicación exacta y en tiempo real, teniendo una mejor gestión de la flota en su trabajo diario y también en los tiempos de respuesta ante cualquier emergencia”, destacó González.