En un operativo reciente, los inspectores de la Municipalidad de Arica junto a la SIP de Carabineros de la Primera Comisaría lograron el cierre de un prostíbulo clandestino que operaba en el centro de la ciudad.
Esta acción es parte de un esfuerzo continuo por erradicar estos lugares, que no solamente fomentan la explotación sexual, sino que también pueden ser escenario de otros delitos graves. La fiscalización rigurosa y la intervención oportuna son esenciales para garantizar la seguridad y bienestar de la comunidad ariqueña.
“En conjunto con la SIP de la Primera Comisaría de Carabineros de Arica, con un proceso investigativo, se llegó a determinar que, en la calle Arturo Gallo, se encontraba en funcionamiento un local de citas de mujeres, el cual estaba infringiendo el código sanitario del artículo 41 y, a la vez, funcionaba como casa de huéspedes, infringiendo la ley 3.063, en su artículo número 23, por activar sin patente”, comentó Hugo Alfaro, encargado del Departamento de Inspecciones Generales de la Dirección de Administración y Finanzas de la Municipalidad de Arica.
“Se procedió a la clausura, ya que las señoritas se encontraban ejerciendo el comercio sexual, el cual era ofrecido mediante las redes sociales. A eso, hay que sumar la denuncia de los vecinos del sector, ya que este estaba siendo bastante concurrido por varones de la ciudad. En el mismo tenor, infringían el artículo 23 de la ley 3.063 de rentas municipales, porque la mitad de las piezas que estaban a disposición funcionaban como casa de huéspedes y no tenían ninguna resolución sanitaria de la seremi de salud, lo cual es una exigencia fundamental para el otorgamiento de esta patente”, cerró el encargado de inspecciones.
El trabajo de los inspectores municipales es fundamental para mantener la legalidad y proteger a los ciudadanos de actividades ilícitas.
