Luego de cinco funciones en el Teatro Municipal de Arica, la obra de teatro “El Manhattan” dejó en claro que, a nivel local, se están generando grandes producciones en las artes escénicas, donde el trabajo colaborativo entre teatro, patrimonio y creatividad, dan buenos resultados.
La opinión de quienes presenciaron la obra es testimonio del encanto que generó en la comunidad ariqueña y las proyecciones para traer de vuelta a los escenarios a “El Manjatan”.
Panorama que disfrutaron jóvenes, adultos y adultos mayores, fue la ocasión perfecta para recordar los tiempos del Puerto Libre ariqueño. Una de ellas fue Edith Oyarzo Sanchez, quien recordó cuando asistió al local junto a su marido, cuñado y hermana, siendo la primera vez que vio a transformistas.
“Felicito a todos los participantes de esta obra, siempre me ha gustado el teatro, es un sacrificio grande preparar todo: los ensayos, la música, el vestuario, muchas felicitaciones porque lo lograron, fue recordar la nostalgia de aquellos años”, comentó.
Jacobo Gajardo, actor local que conoció a diferentes artistas de El Manhattan en su fase final, agregó que le gustó el conflicto, la tesis y el toque que se le dio a la trama: “mitad dramática, mitad cómica, mitad histórica”.
A los reconocimientos, se sumó el nieto del creador del El Manhattan, Patricio Ortiz, familiar de Tino Ortiz, quien manifestó que la historia trajo muchos flashback de cenas familiares, “estoy muy contento y estoy seguro que mi abuelo hubiera estado muy contento de ver esta obra”.
Coka Dumont, icónica bailarina ariqueña, consideró la obra “Espectacular, El Manhattan es un local que dejó historia en nuestra ciudad, así que se las recomiendo porque los chicos se pasaron, super bonito todo, muy bien preparado, se notó que se esforzaron”.
Por su parte, Macarena Luna, bailarina y activista disidente de la agrupación La Coliza, destacó la puesta en valor del Blue Ballet: “Me parece super importante rememorar historias de éxito y apogeo de identidades travestis, me parece importante recordarlos, desde el gran éxito que tuvieron como bailarinas donde terminaron yendo a Europa a mostrar su show, su arte y todo su ser”.
Finalmente, el músico y antropólogo Claudio Villanueva destacó la confluencia de público de todas las edades y la experiencia de volver al teatro: “Ver a adultos mayores reir, llorar, cantar y aplaudir la reminiscencia del ayer bohemio de Arica, fue emocionante, pese a ello, había público de todas las edades disfrutando de esta conexión y encantamiento que logra la obra (…) En tiempos efímeros y de inmediatez donde en Netflix con un botón pausas y reproduces cuantas veces quieres miles de trabajos audiovisuales, donde la atención se limita a los 60 segundos de un reels y los libros son digitales, volver al teatro y a la magia de ver (genuinamente en vivo) arte en sinergia se agradece hasta el tuétano”.
Tras el éxito de convocatoria y las buenas reacciones del público, el equipo de producción está gestionando realizar nuevas funciones para febrero.
