La fotografía de parto es un documental descriptivo que no solamente narra el momento exacto del nacimiento sino que, además, retrata ese instante especial de convertirse en madre y padre.
Los fotógrafos que están presentes en el momento en que llega un hijo al mundo, hacen una labor muy delicada, silenciosa y respetuosa. Gracias a ello, quedan registrados, con calidad profesional, instantes maravillosos y únicos en la vida de cualquier madre y padre. Elizabeth Reyes es fotógrafa de parto autodidacta y lleva tres años desarrollando este trabajo en Arica.
En relación a cómo llegó a este trabajo, Elizabeth comentó que “fue por necesidad y casualidad que llegue a este oficio, vengo de una familia campesina muy humilde de la sexta región, Tilcoco, donde trabajé siempre en el campo cosechando tomates, porotos, papas, de todo lo que hubiera, para ganarnos la vida, pero por problemas graves en mi familia, debí arrancar lejos e iniciar un nuevo camino. Fue así como me vine a Arica”.
Llena de ilusiones y sueños, inició esta nueva etapa de su vida. Al poco tiempo, quedó embarazada y se casó con un militar, del cual nacieron dos hermosos hijos. Pero la historia estaba lejos de ser color de rosas, como lo soñó y pensó Elizabeth. Su marido no le dejaba dinero suficiente, la situación era precaria, por lo que Elizabeth debió salir a la calle, a veces con sus dos hijos, a vender cubos y queques para poder darles de comer.
Un día, mientras pensaba qué hacer para poder tener más recursos y no tener que llevar a sus hijos a la calle, miro una cámara semi profesional que había en su casa, la tomó y fue a buscar a su hija al jardín, sin pensarlo dos veces, empezó a sacar fotos, las envió a revelar y a venderlas a la salida del jardín infantil, de a poco, fueron aumentando sus clientes, sus recursos y su amor por la fotografía.
Un día, se acercó un apoderado del jardín y le pidió hacer una sesión de fotos a su mujer embarazada y, en el pabellón, a su hijo que estaba por nacer. Aceptó de inmediato.
“Aún recuerdo esa primera vez, era un parto natural, después de casi 15 horas de trabajo, junto a los padres y al equipo médico, llegue a mi casa muy cansada, pero feliz y emocionada, sentí como si hubiera vuelto a ser madre… Fue amor a primera vista”, comentó, agregando que “ahí supe que quería dedicar mi vida a este trabajo”.
OTRA FORMA DE DAR A LUZ
La fotografía de parto se desarrolla en situaciones intensas y, en general, contempla el registro del proceso previo, el nacimiento mismo, el apego con la madre y también con el padre, los momentos en que este acompaña a la guagua en la sala donde se le examina y el primer encuentro con los abuelos y los hermanos.
De las 300 fotos que suele hacer en cada sesión, Elizabeth (Ely) selecciona alrededor de 40 para transformarlas en un reportaje gráfico en formato digital y/o de papel, según requiera la familia.
Elizabeth ha fotografiado, en el Hospital Regional de Arica Doctor Juan Noé Crevani y en la Clínica San José, un total de 220 partos de mujeres y padres, con historias muy distintas entre sí. El hecho de ser mujer y madre, evidencia la sensibilidad con que, a través del lente de su cámara, la fotógrafa, captura detalles y expresiones únicas de la guagua, de los padres y el entorno más cercano.
En general, son las embarazadas, quienes contactan a Elizabeth y contratan el servicio. Elizabeth se reúne unas tres veces o más (cuando la madre o padre quieren fotos del embarazo), luego, se contacta con el médico y/o la matrona, primero, para pedir permiso de ingreso al pabellón y, segundo, para mostrarles que su trabajo no interviene con el de ellos.
“No ha sido fácil este camino, algunos equipos médicos han sido reacios a tener una fotógrafa entre ellos, pero, de a poco, me han aceptado, por la experiencia que han transmitido otros obstetras y también al ver la calidad de mis fotografías”, afirmó Elizabeth.
Quien requiera sus servicios puede ubicarla por WhatsApp al +56954950467 y en su Fanpage de Facebook Elizabeth Reyes (fotógrafa Ely).
