(Servindi) "Este desastre ambiental se está transformando en un ecocidio. La industria venezolana deja en evidencia una vez más que está en quiebra y que no existe atención preventiva ni especialistas capaces de atender esta contingencia".
Así lo denuncia Gustavo Carrasquel, director de la Fundación Azul Ambientalistas, frente a la constante presencia de hidrocarburos vertidos por la industria petrolera, que afecta la conservación de la biodiversidad.
A fines de julio, organizaciones ambientales alertaron sobre fugas de petróleo de la refinería El Palito, en Carabobo. Luego de la denuncia, circularon imágenes satelitales de los alrededores de la planta, que respaldan la alerta de los activistas.
Para agosto, el crudo ya había avanzado por la costa hacia el estado de Falcón, alcanzando áreas protegidas y reservas de fauna silvestre. Expertos calculan que el derrame equivale a 22 000 barriles de petróleo.
"Estamos en temporada de huracanes y creemos que la lluvia hizo presión sobre los tanques de almacenamiento de El Palito. Por las condiciones climáticas, el hidrocarburo se fue desplazando hacia el Golfo Triste hasta llegar a los manglares, corales y cayos del Parque Nacional Morrocoy”, alertó Carrasquel.
Morrocoy es un área protegida y reserva marina del Caribe, es uno de los destinos favoritos debido a sus playas y su gran biodiversidad. Sin embargo, ahora se encuentra en peligro a causa del derrame de petróleo que amenaza a la flora y fauna marina del lugar.
LENGUA DE LA MUERTE
Tras descubrir el derrame de la refinería El Palito, la única activa en Venezuela, Deborah Bigio, directora de Fudena, ONG que promueve la conservación ambiental, anunció que es fundamental realizar una evaluación detallada de los daños, porque también preocupa lo que no se ve.
La Sociedad Venezolana de Ecología convocó un foro de más 100 especialistas para analizar la situación y alertó sobre el riesgo para los ecosistemas y comunidades aledañas.
El derrame estaría amenazando el Refugio de Fauna Silvestre de Cuare, humedal de importancia internacional de Venezuela, y hogar de más de 300 especies de aves. Existe información satelital que demuestra la magnitud de la expansión del crudo.
REVERTIR EL DAÑO
Fudena, junto con el Ministerio del Ecosocialismo, ha emprendido jornadas de limpieza de petróleo que se amontona en las playas de Chichiriviche. En este pueblo costero, la ONG tiene una estación, a donde llegaron vecinos preocupados por lo que traían las olas.
“Todos estamos encerrados por la pandemia, pero cuando empezaron a verse los restos y las manchas grandes de petróleo, tuvimos que salir”, informó Bigio. Hasta 200 voluntarios por jornada han escarbado con rastrillos la arena para intentar limpiar el petróleo.
La Asamblea Nacional Venezolana, investiga responsabilidades y causas del incidente al mismo tiempo exige acciones inmediatas para reducir el impacto ambiental en una de las zonas turísticas más atractivas del país.
