Actualmente, un creciente número de mujeres se están animando a probar este método para lidiar con el periodo menstrual que, literalmente, recoge en una pequeña copa de silicona insertada en la vagina la sangre de la menstruación.
En realidad no es una idea nueva: las copas menstruales se empezaron a producir a nivel industrial en los años 30, con grandes altibajos de uso a los largo de las décadas.
Pero en años recientes se han vuelto más populares, gracias a nuevos materiales que las fueron haciendo más cómodas e hipoalergénicas, así como a una mayor conciencia ambiental.
Si ya has probado la copa menstrual o aún no te decides; te contamos cuáles son las principales ventajas y desventajas de su uso.
VENTAJAS
1.- Saludable: Al estar fabricada con silicona médica hipoalergénica, es ideal para mujeres con alergias. No libera residuos de pesticidas ni blanqueadores en el cuerpo (en comparación a las toallitas y tampones).
2.- Económicas y Ecológicas: El precio de la copa menstrual, dependiendo del fabricante, oscila entre los $15.000 y dura hasta 10 años.
En este momento los residuos que más contaminan el planeta son tampones y toallas higiénicas plásticas, junto con pañales de bebés. Una mujer utiliza un mínimo de 13.000 toallas higiénicas plásticas y tampones durante su vida, según biobiochile.cl.
Además, los tampones y las compresas son bastante más caros, si contamos los que usamos a lo largo de un año.
3.- Higiénica: Como la copa queda dentro de la vagina, el flujo menstrual no llega al exterior. Su superficie es lisa, por lo que no acumula bacterias, lo que la convierte en la opción más higiénica en cuidado femenino. Al mantener el flujo dentro del cuerpo, éste no tiene contacto con el oxígeno, evitando así su oxidación y producir malos olores.
4.- Cómoda: Las usuarias señalan que la copita es imperceptible. Además, es ideal para deportistas y viajeras, además de ser una perfecta opción para aquellas con flujo abundante.
DESVENTAJAS
1.- Puede tomar tiempo acostumbrarse a ponerla y a sacarla. Al principio puede resultar un poco incómoda y ser difícil de insertar y retirar.
2. Hay más contacto con la sangre. Si eres escrupulosa o aprensiva con la sangre quizás no sea la mejor opción. También hay que hacer un mayor contacto físico con la zona de la vagina para insertar la copa, algo parecido a ponerse un tampón sin aplicador.
3. Difícil de lavar en baños públicos. Como al vaciar la copa hay que lavarla, necesitas un baño que te permita hacerlo con privacidad. Algunas usuarias dicen que llevan una botella de agua con ellas para poder enjuagar la copa en baños que solo tienen piletas públicas. Otras esperan a hacerlo cómodamente en sus casas, ya que pueden llevar la copa durante muchas horas.
Al comenzar a usar la copa menstrual hat que asegurarse de elegir la talla adecuada, considerando la edad y si ha tenido hijos por parto natural o cesárea, ya que los músculos vaginales se expanden por estos factores.